Creo que es hora de publicarlo. Cabe recalcar lo interesante que es leer acerca de los diferentes milestones de el año pasado ya acabando este.
Este moribundo 2013
A tus dos 7 horas expirantes, caigo en la común tradición colectiva de plasmar una síntesis opinionada de lo que fueron los últimos 364 días y un poco más.
Los dos primeros meses del año, fueron dos maravillosos roller coasters, de los cuales al terminar el viaje, termine mareado y nauseabundo pero aprendí maravillosas lecciones que me pongo en uso hasta el día de hoy. [Trajeron consigo una re-evaluación completa de mi ser], una exploración a fondo de un lado artístico casi olvidado. (Una historia de amor imposible y una tragicomedia romántica)
En marzo, fui fiel compañero del sillón de un psicólogo, decidido a descubrir y enfrentar añejos fantasmas que aun traían consigo desilusión. Obrero incasable y obstinado en la reconstrucción de una relación donde la confianza había perdido su rol de fundamento. Víctima (y con toda razón) de miradas y comentarios desesperanzados.
En abril tenía planeado tomar un avión a NY, esta era una de mis metas de este año, la cual no cumplí. Ese viaje fue cancelado después de mucho pensar y siendo esta la decisión correcta.
Mayo trajo consigo la perdida de una gran amiga y persona, no porque murió, sino porque a razón de mis necedades, acumule una lista de razones suficientes para un despido iracundo. Esto trajo consigo más reflexión, no dire que no me ha hecho falta pues estaría mintiendo.
En junio tuve la dicha de tomar una clase donde el profesor fue una persona que llevaba mucho tiempo admirando desde la distancia, una figura que antes de la clase marcaba el trayecto, sin saberlo, de cómo quería vadear por la vereda laboral. Durante esta, aprendí bastante de un temario que desconocía en lo absoluto y me guío en rumbo a como seguir descubriendo esas vastas planicies de conocimiento. Y tuve la dicha de crear una relación con aquel que fue mi maestro y ahora mentor.
Un fin de semana del mes de agosto, tome la iniciativa de participar en Startup Weekend, un evento de emprendedurismo donde durante dos noches consecutivas se pasa de tener la idea a un proyecto terminado, claro en un sentido figurado, fue una experiencia interesante donde pude conocer gente a la cual pasaría a lookup to. En si la experiencia, aunque interesante no fue tan emocionante como esperaba debido a la destreza como conjunto que tenía mi equipo. Prácticamente todas las pieza iban cayendo bajo su propio peso. No está de más decir que ganamos 1er lugar. Pero nos juntamos 2 veces y ahí ha quedado el proyecto.
Ya entrando en el último cuatrimestre del año, entre a un nuevo trabajo y con esto el primer paso en busca de las condiciones laborales que creo necesarias. un mes de mucho aprendizaje y formo parte de una comunidad un de desarrolladores de ruby donde contribuimos de una manera u otra al aprendizaje del otro.
Noviembre marco mi inicio como profesor, pues una amiga me presento la oportunidad de impartir un módulo en un diplomado en una universidad de mi país, fue una experiencia bastante interesante, que estoy seguro repetiré. Durante 5 semanas impartí clases viernes y sábados a un grupo de 17 personas, jóvenes y adultos, acerca de temas básicos de desarrollo con el framework .NET. Esto me permitió afianzar mis conocimientos que muchas veces eran empíricos y carecían de una base teórica.
Y ya en el mes de diciembre, el espíritu navideño me invadió de gran manera, cuando opte por dar regalos a los miembros de mi familia, regalos que de alguna manera u otra los ayuden a tener un mejor porvenir. Tuve la mala suerte de no poder costear el regalo que tenía en mente para mi padre. Y para rematar tuve un accidente en su automóvil.
Estas son: mi historia, mi verdad y mis circunstancias.
Y con mi vida las defiendo.
